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    Intervención de Raimon Obiols en la ejecutiva del PSC sobre la Conferència Oberta (15 de febrero de 2010)

    Publicado por Raimon Obiols | 15 Febrero, 2010


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    universitat_estiuHace unos meses vine a una reunión de esta ejecutiva para presentar la iniciativa de la Conferència Oberta “Catalunya Causa Comuna”.Ahora vengo de nuevo a contaros que hemos hecho hasta ahora, ¿qué nos proponemos hacer en los próximos tiempos y, en tercer lugar, para discutir con vosotros que creemos que debería salir de nuestra iniciativa.

    ¿Qué hemos hecho?

    Como sabéis, hemos realizado una buena cantidad de sesiones de debate, a lo largo y ancho de Cataluña. Hemos recorrido Cataluña con decenas de actos públicos y la participación de miles de personas. Los temas que se han discutido han sido muy diversos y se han agrupado dentro de los tres grandes ámbitos que se propusieron en el llamamiento inicial:

    1. La salida de la crisis: ¿Qué está pasando en este periodo de crisis y de cambios globales, rápidos e impresionantes. ¿Qué propuestas se pueden plantear para hacer frente a los retos y problemas que la crisis global suscita, para aprovechar las oportunidades.
    2. El catalanismo del siglo XXI: Los retos y estrategias del catalanismo del siglo XXI. Como afirmar su carácter de causa común, defender el pluralismo como una fuerza, superar la confrontación de retóricas repetitivas y asegurar la unidad civil del pueblo de Cataluña.
    3. La solidaridad social y la revitalización democrática: Las buenas prácticas en el campo de la solidaridad y de la innovación sociales, así como de las nuevas formas de participación y deliberación colectivas, para revitalizar nuestra vida democrática.

    El balance de esta actividad ha sido positivo tanto desde un punto de vista cuantitativo como cualitativo. Dijimos inicialmente que nos proponíamos invitar a nuestras discusiones a todas aquellas personas que estuvieran abiertas a hablar con nosotros. La respuesta a esta invitación ha sido muy satisfactoria. No nos hemos encontrado ni con negativas ni con excusas: todos a quienes hemos invitado han aceptado participar de buen grado, y mucha gente nos ha dicho que esperaban una oportunidad de deliberación común y transversal, porque estaban cansados del predominio de la confrontación política y mediática más o menos repetitiva, sobre posiciones y prejuicios que se dan por descontados.

    Ha asistido y participado en nuestros debates gente que cubre un espectro muy amplio: gente de todos los partidos democráticos catalanes, tanto del gobierno como de la oposición; responsables de las centrales sindicales mayoritarias, los grupos empresariales, del mundo cultural y académico; del movimiento asociativo, etc. No hemos hecho ostentación. Nuestra iniciativa no es ni electoral ni a corto plazo. Queremos demostrar prácticamente que es posible un diálogo plural, auténtico, sin instrumentalizaciones partidistas de corto vuelo. Queremos afirmar que la idea de que Cataluña es una causa común es estratégicamente fecunda, que es la más positiva para el país. Una Cataluña dividida no puede ganar.

    Un debate como el que estamos haciendo, sin confrontaciones ni descalificaciones, paga inevitablemente, en las circunstancias actuales, el precio de no tener una preeminencia en la escena mediática.

    Pero si se realiza, como estamos haciendo, con energía, constancia y amplitud, tiene una incidencia en la opinión pública que no es efímera y contribuye a la necesaria regeneración de nuestra vida democrática.

    De todos modos, ahora entraremos en una fase más visible de nuestra iniciativa, y nos interesa que nuestros debates lleguen más a los medios de comunicación. No es un objetivo fácil, sobre todo porque nos mantendremos firmes en nuestra actitud de no contribuir a generar confrontaciones.

    No somos partidarios ni de la manipulación política de los medios ni de la manipulación mediática de la política y mantenernos firmes en esta posición representa en estos momentos una dificultad de la que somos perfectamente conscientes. Pero si queremos combatir la desconfianza, si queremos regenerar la vida democrática, debemos hacerlo.

    ¿Qué nos proponemos hacer en los próximos tiempos

    El próximo 27 de marzo, en el Centro de Convenciones Internacional de Barcelona-Fórum, hemos convocado el Primer Plenario de la Conferència Oberta. Será una jornada entera de debates.

    Se constituirán siete ámbitos de discusión:

    1. ¿Qué esperamos de la educación de hoy

    Hay un gran debate sobre la calidad, la autoridad y la eficiencia máxima del sistema educativo y de la formación. Queremos un sistema que democratice la excelencia, que luche contra la reproducción de las desigualdades sociales, que permita el acceso a todos los conocimientos profesionales y a la cultura, que refuerce el papel esencial de los y las docentes, y que afirme unos objetivos y unos valores compartidos.

    2. Los jóvenes: motor de la participación

    La juventud es el futuro de Cataluña. Es un sector dinámico, plural, especialmente vulnerable por la incertidumbre y las dificultades de la situación económica actual. Debatiremos sobre las aspiraciones, problemas y propuestas de la juventud de Cataluña.

    3. Buenas prácticas e innovación social

    La sociedad civil – sus asociaciones, movimientos, sindicatos – tiene que jugar un papel esencial en las dinámicas de progreso de Cataluña. Queremos reflexionar sobre su acción, los procesos de deliberación democrática, los instrumentos y experiencias en el campo de la solidaridad social, la necesaria innovación de los procesos de discusión y acción colectivas.

    4. El catalanismo del siglo XXI

    Debatiremos sobre los nuevos planteamientos del catalanismo, los objetivos y retos de nuestro autogobierno, la unidad civil del pueblo de Cataluña, los riesgos a evitar de populismo y fragmentación, en busca de una visión estratégica común para los próximos años, para hacer de Cataluña una sociedad más justa y libre, más dinámica y segura.

    5. Tras la crisis: retos y oportunidades

    Vemos la crisis actual como un grave problema pero también como una ventana que nos abre nuevas oportunidades. Trataremos de los cambios posibles en la economía y en la sociedad, en la vivienda, el territorio, el medio ambiente y el paisaje. Debatiremos las perspectivas de transición positiva hacia un modelo económico más eficiente y sostenible y hacia un modelo social más justo, solidario y cohesionado.

    6. Ciudadanía, diversidad y cohesión: la Cataluña crisol

    Cataluña es un país de acogida y de fusión, abierto y enriquecido por la diversidad intercultural. Ahora, la buena incorporación al país de los nuevos ciudadanos y ciudadanas de origen extranjero representa un reto que exige nuevas políticas afirmativas.

    7. Espacio 2.0

    Utilizaremos la Red para expandir los debates del Plenario y recibir las aportaciones de más gente.

    Estoy convencido de que el primer Plenario de “Catalunya Causa Comuna ” dará una “sorpresa cuantitativa”, por el número de participantes, y también una “sorpresa cualitativa” en cuanto a su pluralismo y a la calidad de sus aportaciones.

    Por otra parte, la Conferència Oberta no se cierra en esta sesión plenaria al contrario: pretendemos que ésta sea un elemento de impulso del debate, a toda Cataluña.

    El momento político de esta primera sesión plenaria

    Queremos que este primer Plenario de Catalunya Causa Comuna contribuya a hacer más positiva la situación política catalana. En primer lugar, tratando de situar el propio debate de la Conferència Oberta, que continuará su labor, en un estadio superior, con más participación y más proyección pública.

    En segundo lugar, lanzando unas propuestas, fruto de nuestros debates, que dirigiremos no sólo al PSC sino al conjunto de los actores de nuestra vida colectiva: a los partidos democráticos, los responsables de las instituciones, los agentes sociales y económicos, los medios de comunicación, al tejido asociativo del país y, más ampliamente, la opinión pública.

    Catalunya no está fatigada. Está desorientada. Y no es extraño que sea así, porque todo se vive un tiempo desorientado, de desconcierto: en España, en Europa, y buena parte del mundo.

    Esto se debe a diversas causas. Es una consecuencia, en primer lugar, de la crisis económico-social (desempleo, inmigración, etc.).También de una crisis democrática, en la que se asocian diversos elementos que acentúan la desconfianza ciudadana (la corrupción, sobre todo, pero también el espectáculo de la confrontación, sistemática, primaria y abrupta, entre los partidos; también un mensaje mediático permanente de descalificación de los “políticos” y de las instituciones democráticas, etc). En Cataluña, además, se añaden las cuestiones derivadas del encaje con España.

    Esta situación alimenta el populismo. Este fenómeno, en fase germinal, es casi general en toda Europa. Pero en Cataluña puede significar, además, el riesgo de surgimiento de populismos antagónicos y enfrentados, en los dos extremos del arco político, jugando con la anti-política, sobre todo a partir de la explotación de los sentimientos de identidad y los temores generados por la crisis y la inmigración, buscando de poner en crisis nuestra fuerza fundamental: la unidad civil del pueblo de Cataluña.

    Cualquier observador de los movimientos actuales de la política catalana coincidirá en que éste es el modelo de desorden que algunos nos están preparando. Cada semana surgen noticias de surgimiento de nuevas “alternativas salvadoras”, en un panorama de fragmentación y divisiones. No faltan colaboraciones mediáticas potentes que apoyan estas aventuras.

    Es evidente también que la derecha española juega esta carta de fomentar una eventual confrontación exasperada dentro de Cataluña.

    Son fuerzas centrífugas que buscan acentuar el malestar, el escepticismo y el desistimiento de la opinión. Es una ofensiva de la anti-política fomentada por sectores de poder sin escrúpulos que saben que en una situación de este tipo podrían imponer sus intereses. No faltan en Europa algunos países (no sólo Italia) donde esta situación ya es hoy un hecho. Cataluña no se puede permitir una deriva de este tipo, que podría convertirse en una aventura devastadora.

    Lo peor que nos podría pasar en Cataluña sería que se produjera la siguiente secuencia:

    1 / divorcio progresivo entre, por un lado, unas opciones políticas cada vez más fragmentadas y excluyentes y, por otro, una sociedad cada vez más escéptica, disgregada y abstencionista;

    2 / consolidación, en la sociedad catalana autóctona e inmigrada, de coágulos persistentes de identidades comunitarias aisladas y confrontadas;

    3 / instrumentalización de esta situación por los populismos y identitarismos de signo antagónico;

    y 4 / fractura del proceso de unidad civil y de fusión colectiva y su sustitución por un “choque de identidades” en el interior de Cataluña.

    Esto significaría la división permanente, el declive, la instrumentalización de Cataluña por unas minorías interesadas en la confrontación, especialmente la derecha española.

    Los ciudadanos y ciudadanas de Cataluña sólo podremos determinar nuestro futuro colectivo si es mayoritaria una visión clara de las posibilidades que tenemos delante. Sólo desde una comprensión de la situación histórica específica y concreta en que se encuentra Cataluña, definiendo entre todos las líneas de cambio posibles en los años siguientes, podrá desarrollarse el papel activo y determinante de un catalanismo de progreso, renovado, realista y inventivo, común, sin otras divisiones que las propias del legítimo, lógico y necesario pluralismo de las opciones democráticas. Esto nos exige seriedad, respeto democrático, creatividad, respeto escrupuloso a las instituciones democráticas, alianzas amplias torno a determinados objetivos estratégicos básicos.

    Estamos en una nueva situación, en una nueva fase: es la hora de plantearse muy en serio los retos que tenemos delante. La Conferència Oberta “Catalunya Causa Comuna” es, en este sentido, un instrumento extraordinario, de una enorme potencialidad. Os pido que contribuye con el máximo apoyo posible.

    Categorias: Catalunya Causa Comuna, Conferència Oberta, Política catalana | Sin Comentarios »

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